La semana pasada participé en un webinar de la escuela de negocios digital ISDI para hablar sobre la ‘nueva normalidad’ en las compañías. Este tipo de formatos se ha convertido en parte de nuestro día a día, de esta realidad más digital en la que vivimos desde hace meses, y creo que son una herramienta fantástica para compartir conocimiento. Todos los que participamos en este encuentro coincidimos en lo mismo: esta situación ha ratificado cosas que antes se discutían pero que ahora ya no admiten dudas. En esta vuelta progresiva a nuestra rutina diaria, a la oficina, la manera en la que trabajamos también va a cambiar. Y como comentábamos en el webinar, hay tendencias que ya habían aparecido, como el teletrabajo o la sostenibilidad, pero que ahora ya no ofrecen discusión.
En Sanitas estamos preparando esa vuelta al trabajo con gran responsabilidad para proteger a todos nuestros empleados, pero también con mucha ilusión. Se plantean nuevos retos en las empresas sobre cómo serán las oficinas en el futuro. Sin duda la digitalización va a seguir siendo –aún más si cabe- nuestra gran aliada. El teletrabajo es una realidad pero no solo eso, la oficina del futuro será más flexible y un lugar mucho más atractivo al que acudir cada día. Todo esto va a ser una parte fundamental de la atracción de nuevo talento.
El teletrabajo es una realidad pero no solo eso, la oficina del futuro será más flexible y un lugar mucho más atractivo al que acudir cada día. Todo esto va a ser una parte fundamental de la atracción de nuevo talento.
La digitalización en el trabajo también nos ha traído reuniones más cortas y efectivas, y estoy seguro de que también en el futuro ayudará a reducir el número de viajes de trabajo. Sin embargo, creo que el cambio será mucho más profundo. Durante el confinamiento, y gracias a que hemos podido seguir trabajando en casa con ayuda de la tecnología, los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) en la atmósfera se redujeron más de un 50% de media en toda España. Antes de esta situación, la sostenibilidad ya era una preocupación social. Y viendo que gracias a determinadas acciones, como el teletrabajo, podemos ayudar a cambiar las cosas, creo que es una lección que no debemos olvidar; la sostenibilidad debe seguir ocupando un lugar relevante en esta vuelta a la nueva realidad. La biodiversidad, la calidad del aire o el cambio climático se han revelado como los factores clave que determinan nuestra salud individual y la salud pública de todos. Los científicos nos lo decían, lo sabíamos, pero no lo interiorizábamos ni estábamos preparados para cambiar nuestro estilo de vida. Ahora somos más conscientes de que nos va la salud y la vida en ello.
Además, esa preocupación por el virus ha llevado a generar entre los ciudadanos una mayor conciencia sobre nuestra salud. Aquí las empresas tenemos que liderar una misión de vital importancia: cuidar lo mejor posible de la salud de nuestros empleados. No solo protegerles del Covid-19 o de otras futuras epidemias, sino desarrollar programas que contribuyan a mejorar su estado de salud y, por tanto, su resiliencia ante futuros embates de nuevas epidemias
Desde hace más de 10 años contamos con Sanitas Smile, un programa en el que participan más de 5.000 empleados a los que ayudamos a mantenerse saludables a través de planes de mejora de la nutrición, la actividad física y la salud emocional. Contamos con dos gimnasios (uno en nuestras oficinas centrales y otro en nuestro call centre), realizamos talleres, promovemos actividades deportivas… Y como sabéis, nuestra obsesión es medirlo todo. Así que realizamos un estudio para conocer el impacto de este programa en la salud de nuestros empleados. Pues bien, en 2019 el análisis confirmó que, del total de parámetros de salud medidos (índice de masa corporal –IMC-, peso, presión arterial o colesterol), los empleados mejoraron en todos los apartados, en particular destacaba el descenso en los niveles de sobrepeso. Ahora todo esto será también digital, los empleados se podrán conectar a las clases colectivas y seguirán webinars que les ayuden en su nutrición o su bienestar emocional. Además, lo digital también nos ayudará a llegar a muchas más personas en todos los centros de trabajo que tenemos distribuidos por todo el país.
La pandemia del Covid-19 ha sido una experiencia muy dura. Pero no tengo duda de que estamos saliendo de ella reforzados, mucho mejores. Ahora vivimos en un nuevo mundo donde el contacto físico es casi un lujo, aprovechemos esos momentos para hablar, compartir ideas, aprender, crear juntos, todo esto sigue siendo mejor cuando la relación es presencial. Y no perdamos de vista estas lecciones que hemos aprendido en el camino. De nosotros depende que esto no se quede en simples ideas sobre un papel, el cambio comienza en uno mismo.